El humanismo es la característica más sobresaliente en la filosofía china, básicamente debido a la enorme influencia del Confucianismo.
Contrario a lo que se cree, el Confucianismo no es solamente una religión, sino es también una doctrina basada en la filosofía de Confucio o Kung-Fu-Tzu.
Al respecto, el Confucianismo poseyendo dogmas y prácticas, carece de deidad, pues ni el mismo Confucio se consideró como tal.
La escuela más antigua del pensamiento chino se caracteriza por promover los sentimientos humanos para mantener la integridad y el bienestar de los individuos.
El pensamiento confuciano ha sido una tradición espiritual esencial en China desde tiempos remotos cuando fue religión oficial hasta ahora.
Igualmente ha ejercido una gran influencia sobre países como Corea, Vietnam y Japón.
En la provincia de Shandong en China, se encuentra el Templo de Confucio, declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1994.
Este recinto sagrado ubicado específicamente en la población de Qufu, incluye tres elementos:
- El Templo de Confucio, el Cementerio de Confucio y la Residencia de la familia Kong.
Otro templo del Confucianismo fue levantado durante el año 1893 en Japón, llamado el Templo Confucionista de Nagasaki.
Los occidentales han llegado a comparar a Confucio con el filósofo griego Sócrates, llamándolo el Sócrates chino.
Historia del Confucianismo.
Confucio nació en Qufu, poblado del Estado Lu durante la dinastía Zhou en la antigua China, en el 551 A.C.
Descendiente del clan noble Kong, vio truncada su vida con la muerte de su padre, dejándolos en la pobreza.
Pero esto no fue motivo para alcanzar el cargo de Ministro de Justicia, y posteriormente convertirse en magistrado en Zhongdu.
En este tiempo estableció importantes reformas de justicia que eran imparciales ante el crimen.
Luego llegó a ocupar un alto cargo en Lu, que dejó para iniciar una peregrinación que duró doce años.
Viviendo un período de grandes revueltas llamada Primavera y Otoño, su objetivo político fue la reconstrucción de la sociedad a partir de la ruina y el caos.
De esta manera se dedicó especialmente a la enseñanza de funcionarios de Estado, basándose en el pensamiento que un buen gobierno depende de la educación de sus empleados administrativos.
También Confucio formuló un sistema de gobierno organizado, que distribuyera las riquezas, asumiendo la responsabilidad en educación y seguridad social.
Aunque no fue un líder religioso, aceptó la creencia tradicional en la que el Cielo era la deidad soberana, y el emperador como su representante ante todos los hombres era el responsable de la liturgia y los ritos.
La preocupación de Confucio fue la sociedad, por ello se fundamentó en la conducta responsable y respeto a la tradición.
Cuando murió a los 72 años, Confucio había enseñado a un total de 3.000 discípulos que posteriormente transmitieron su filosofía.
Entre el 206 A.C. y 220 D.C., el Confucianismo se convirtió en la base del Estado durante la dinastía Han.
Siendo un reformador político, su doctrina social fue conservadora y tradicional, dejándola plasmada en una serie de obras literarias.
Los Cinco Clásicos del Confucianismo.
En los libros llamados los Cinco Clásicos se encuentran algunos principios del Confucianismo, aunque no fueron escritos por Confucio, él mismo impulsó a leerlos y aprender de ellos.
Estos representan una recopilación de un conjunto de doctrinas que todo seguidor confuciano debía conocer, conformado por las siguientes obras:
- I Ching o Libro de las Mutaciones, un texto de predicciones, reconocido por el taoísmo.
- Shu Ching o Libro de la Historia, es una recopilación narrativa de documentos de la antigua China.
- Shih Ching o Libro de las Poesías, un compendio de 305 poemas antiguos, 160 canciones folclóricas y 74 coplas festivas.
- Li Chi o Libro de los Ritos, contiene conocimientos en cuanto a la educación, vida, cultivo físico y mental.
- Chunqio o Anales de Primavera y Otoño, cuenta la cronología de los importantes sucesos de revuelta durante la China feudal.
Cuatro Libros del Confucianismo.
Los Cuatro Libros, contienen la filosofía de Confucio y Mencio, el más fiel seguidor del Confucianismo, en ellos se muestran la filosofía de la sabiduría y el conocimiento:
- Gran Saber, basado en las enseñanzas de Confucio, contiene los métodos para la selección de los funcionarios administrativos.
- Doctrina de la Medianía, en él se desarrolla el concepto entre dos extremos y el punto medio, como por ejemplo, opulencia y pobreza, rigor o blandura.
- Analectas de Confucio, conforma la transcripción de los discursos del gran maestro, representando el mayor trabajo del Confucianismo.
- Mengzi, escrito por el filósofo chino Mencio, donde declara que el hombre bueno por naturaleza debe desarrollar una conducta equilibrada.
Para Mencio hay cuatro sentimientos naturales que logran la rectitud: compasión vergüenza, respeto y discernimiento.
Doctrina del Confucianismo.
La clave filosófica del Confucianismo es jen, que representa las mejores cualidades humanas como honradez, felicidad, bondad, decoro, sabiduría.
Por consiguiente, en las relaciones humanas jen se transforman en chung, que representa la felicidad propia así como la de los demás, que finalmente genera shu, que es el altruismo y la propiedad individual de practicar estos rituales diariamente.
En otras palabras esto quiere decir: no hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti.
Toda esta forma de comportamiento recibe el nombre de li, que se refiere a las normas que guían a las personas en sus relaciones sociales.
Dentro del Confucianismo se resumen los mandatos que debería emplear cualquier funcionario de gobierno:
- Amar y servir al pueblo proporcionándole los medios necesarios para la vida diaria.
- Desarrollar los atributos personales tendiendo a buscar la perfección.
- Comportarse de la misma manera tanto en la vida privada como pública.
- Tener como objetivo personal la paz universal y la armonía general.
- Ser consciente de los tipos de inclinaciones naturales del hombre, las que provienen de la carne son peligrosas, las que pertenecen a la razón son más sutiles y fáciles de perder.
- Practicar los deberes de las cinco relaciones sociales: gobernador-ministro, padre-hijo, marido-mujer, hermano mayor-hermano menor y entre amigos, donde el superior tiene la potestad de protección y el inferior de lealtad y respeto.